Pronunciamiento de IDeaS sobre el caso Ayotzinapa: ¡vivos los queremos!

Hoy se cuentan ya 19 días desde que el 26 de septiembre en Guerrero, la policía municipal de Iguala desapareció a 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa y asesinó a otras 6 personas. 19 días después, familiares, amigos y compañeros siguen en vela pidiendo lo mismo que el día anterior: que cada uno regrese bien a casa. A esa exigencia nos sumamos todos. En particular, hoy se suma el grupo estudiantil del Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, Campus Ciudad de México (ITESM-CCM), Ideas.

Hoy, nos sumamos porque la despolitización en nuestros círculos raya en una peligrosa indiferencia; porque no podemos callar ante un acto desolador que violentó el proyecto de vida de nuestros compañeros; porque si no lo hacemos ahora, pronto estaremos completamente rebasados y sin posibilidades de dar marcha atrás; porque todos estamos expuestos –claro ejemplo es el caso del compañero Kim Kaiser, herido por la policía ministerial de Guerrero. La violación sistemática de Derechos Humanos, la criminalización de la protesta social, las desapariciones forzadas, la tortura, las ejecuciones extrajudiciales, la desconfianza en las autoridades y el miedo, son características de una dictadura represiva que no vamos a tolerar. Tristemente, nuestros compañeros de la Normal Rural ya se enfrentan a ellas, pero no están solos en su lucha. Como colectivo de estudiantes, nos sumamos al gran cuerpo de apoyo.

Hoy, reclamamos justicia, pero no es suficiente con comenzar averiguaciones previas a un cuerpo de policía municipal corrupto, torturador y asesino. Lo que más nos hace falta, nuestra principal demanda, son nuestros compañeros. Hijos de, amigos de, hermanos de; soñadores, trabajadores, jóvenes; estudiantes, activistas, luchadores; 43 personas con nombres e historia: ¡VIVOS SE LOS LLEVARON, VIVOS LOS QUEREMOS! Es tiempo ya de que el débil deje de quedar a merced del poderoso, mientras el Estado se mantiene omiso o, incluso, favoreciendo –todavía más– al más fuerte. Se deben acabar casos como éste, en el que el Poder Judicial está parasitado por la delincuencia. Esta es una oportunidad de sentar un precedente en la historia moderna de México; por ello:

Exigimos justicia expedita y transparente. Que nuestros compañeros puedan volver a trabajar por sus objetivos. Que los culpables del crimen salvaje no queden impunes.

Exigimos que se detenga la criminalización de la protesta social, cuyos nefastos resultados son cada vez más difíciles de esconder.

Exigimos al Estado Mexicano un trato equitativo para todos, desde la garantía de acceso a derechos, hasta la impartición de justicia. Un Estado selectivo sólo puede provocar mayor desigualdad social.

Ofrecemos todo nuestro apoyo y solidaridad con las víctimas de estos crímenes. Nos unimos al colectivo en la exigencia y demandas, pero también en el trabajo. Repetimos: no están solos en la lucha.

Mañana podremos salir de esta crisis, de la barbarie, de la incertidumbre y del miedo si nos reconocemos en los otros. Nuestros compañeros de la Normal Rural de Ayotzinapa no son distintos a nosotros y su caso no es aislado. Lo que viven en estos momentos no tendría que ser soportado por nadie; por ahora, seguimos hombro con hombro apoyando en la demanda de justicia, exigiendo volver a ver a nuestros 43 compañeros a salvo. Cuando esta angustiante jornada termine y todos estén de vuelta, será momento de sentarnos a pensar en la manera de evitar que una situación así se vuelva a dar en cualquier rincón del país. Mientras tanto:

¡VIVOS LOS QUEREMOS!

IDeaS